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| Lampara Madhuri Dixit: 210 euros |
Todos tenemos un terrible secreto o un vicio que nos arrastra hasta los meandros más oscuros de la Humanidad...Pues a mí me gustan las pelis de Bollywood.
Frente a la hostilidad declarada de todos mis familiares y amigos intenté dejarlo, pero los parches están muy caros y el estado de dependencia muy fuerte. Tengo asumido el hecho de administrarme de vez en cuando para mi bienestar una dosis de imágenes cutres y coloradas, donde las chicas con pelo negro y muy largo bailan hasta con las pestañas y cantan con un nivel de agudeza un pelin inaguantable para el oído occidental. Hacen el elogio del amor sincero, incondicional e inalterable para el personaje análogo masculino, en general encarnado por Sharuk Khan, "babe" del cine indio.
Es de reputación internacional que la industria cinematográfica Bollywoodiana es la más prolífica del mundo, y no puedo negar que la cantidad no incluye la calidad. Pero cuando quiere, la genialidad india consigue moldear y revelar belleza en su más centelleante manifestación.
Visionando por la primera vez Devdas (2002), no pensaba que este encuentro iba a tener una importancia capital en el desarrollo de mi sensibilidad. En el papel de la prostituta generosa Chandramukhi, actúa y baila Madhuri Dixit, una de las actrices más aduladas de la industria Bollywood. Si buscais la definición de la palabra carisma en el diccionario, seguramente os encontrareis con este nombre a la consonancia extraña.
Cuando ella baila, trasmite y despierta la alegría originaria, la esencia que duerme dentro de todos nosotros. Su sonrisa emite bastante luz para alimentar las más grandes metrópolis industrializadas durante siglos y las expresiones de su viso llevan las emociones directas y francas hasta el corazón.
Cada vez que necesité un poco de luz para iluminar mi camino personal, me referí a ella, y me ayudó a entender la sutilidad que hay en cada cosa, y en cada ser viviente.Por eso, (si, si, he terminado de escribir mariconadas...) cuando me puse a pensar cómo podía yo también dar un poco de luz con mi arte, tuve la idea de hacer una lámpara, y por el mismo medio un homenaje (más que humilde) a la belleza y luminosidad de esta mujer, diosa entre los Hombres, que me ayuda a conservar en vista, en mente y corazón lo Bello, y la potencialidad que, come la lámpara Madhuri Dixit, está esperando a que nos conectemos con la corriente de energía creativa para poder expresarse.
